El Hierro vivió anoche otra jornada de máxima presión migratoria con la llegada de 126 personas en varias embarcaciones rescatadas por Salvamento Marítimo en plena ruta atlántica. Los ocupantes, entre ellos mujeres y menores, fueron trasladados al puerto de La Restinga para recibir asistencia básica tras una travesía especialmente dura.
Aunque todos presentaban un estado de salud aparentemente estable, el flujo constante de llegadas mantiene a la isla al límite. Los recursos de acogida continúan tensionados y los dispositivos de emergencia trabajan sin descanso ante un fenómeno que no muestra señales de frenarse.
A pesar de que El Hierro se ha convertido en el principal punto de entrada de la ruta africana, las administraciones siguen sin ofrecer una respuesta coordinada que alivie la presión sobre la isla. Mientras tanto, los equipos locales, Cruz Roja y voluntarios siguen asumiendo prácticamente en solitario la carga de un reto humanitario que parece no tener fin.